Un mensaje de texto llega y el teléfono celular pita. Alguien hace una entrada en el muro de
Facebook, y una notificación grande y roja explota en la pantalla. El ruido conocido suena mientras
un correo electrónico llega a su computadora. En todos los rincones, se puede encontrar la
tecnología. El uso de la tecnología está aumentando rápidamente. En el pasado, solamente unas
personas privilegiadas tenían la oportunidad de usarla, no obstante ahora, en nuestro medio, es casi
imposible encontrar a una persona sin un teléfono celular o sin una computadora. Sin duda, el uso
aumento de la tecnología impacta la vida de todos, pero especialmente la de los jóvenes quienes
crecieron con ella. Hay argumentos a favor y en contra de la tecnología, pero es evidente que esta
tiene una influencia negativa en los jóvenes ya que reduce la habilidad de interacción social, la
productividad, e introduce un problema nuevo en la etiqueta.
En el pasado, toda la interacción humana se hacía cara a cara. Si alguien quería hablar con
otra persona, era necesario que visitara su casa para hablar. No había ni correo electrónico, ni
teléfono celular, ni Facebook. En resumidas cuentas, la interacción del pasado era mucho más
Dancz 2
personal.
Este fenómeno tecnológico causa muchos problemas para el individuo. En primer lugar,
se pierde la habilidad de leer las expresiones faciales. Un estudio mostró varias fotografías de
diferentes expresiones faciales a un grupo de jóvenes y adultos, pidiéndoles que identificaran la
emoción en cada foto. Al fin y al cabo, el estudio encontró que mientras los adultos podían
identificar las emociones correctamente en casi todas las fotos, los jóvenes no pudieron hacerlo. En
conclusión, hay una correlación entre el uso aumentado de la tecnología y la habilidad reducida de
identificar emociones. De ese modo, como se puede ver, la interacción social de los jóvenes, por
desgracia, está siendo arruinada por tecnologías como los teléfonos celulares y el Internet que no
requieren de la interacción personal